Por Celia Rodríguez
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Si tú tuvieses un sistema con el que tener control sobre ocho mil millones de personas y decidieses modernizar ese sistema, ¿lo cambiarías por una tecnología desarrollada en cuatro años? ¿O lo harías mediante algo que se lleva probando más de una década, y por unos usuarios que se creen que están creando una vía alternativa para dejar de estar controlados?
Cuando tomé esta foto de arriba se me ocurrió que no había alegoría mejor para explicar la realidad económica actual.
― “La defensa popular presa y cercada por los poderes económicos” ― pensé.
El monumento a los Caídos por España, héroes del 2 de mayo, está completamente vallado en la plaza de la Lealtad de Madrid, arrinconado por el Hotel Ritz y el Palacio de la Bolsa. Pero ¿quién debe ser leal a quién? ¿La economía al pueblo o el pueblo a la economía?
Me dio por suponer que encerrar la vehemencia del pueblo, es una buena forma de mantener el estatus quo, por si acaso…
Voy a ser polémica e impopular, y a tocar unas cuantas narices ya que estamos. Porque hoy voy a hablar un poquito mal de esa pirámide de naipes llamada Bitcoin.
Por si te ha dado por vivir dentro de una tinaja (y bien que harías) y no te suena nada de esto, te pongo en contexto: allá por el año 2008, Satoshi Nakamoto, que es un señor que no existe (¡como Michael Knight![1]), decidió crear una moneda digital. En lugar de oro o cualquier otra cosa tangible, Bitcoin y todo el universo paralelo(s) de criptomonedas y tokens está elaborado con algoritmos matemáticos. Todo el sistema de intercambio se respalda por un sistema de registros “inviolable e incorruptible” llamado cadena de bloques o Blockchain.
Su fin era el de liberar al mundo de la tiranía de los bancos centrales gobernados por los de siempre, creando un nuevo sistema de intercambio, donde los únicos actores sean personas particulares como tú y yo, que podamos, desde nuestros ordenadores, validar las operaciones que quedarán registradas en esa cadena de bloques. A esto se le llama economía descentralizada.
Si bien la idea suena genial (y no tengo datos para decir que este no sea la motivación real de sus desarrolladores), hoy y desde hace varios años, el desarrollo de Bitcoin y el resto de criptomonedas, la tecnología que la sustenta, las plataformas informáticas, las tarjetas gráficas que hacen los cálculos matemáticos (llamadas comúnmente “mineros”) y demás, están siendo desarrolladas por los de siempre, sí, por los mismos que pueden meter mano en los bancos centrales, que se alojan en el Ritz y que se dejan caer por el Palacio de la Bolsa de vez en cuando.[2]
Por otro lado, al igual que el oro o el petróleo son recursos finitos[3] y por eso son caros, los algoritmos que definen qué es un Bitcoin y qué no lo es, son finitos. Aunque los números sean infinitos, por alguna suerte de birlibirloque, estos no gozan de tal cualidad. ¡Claro que sí!
CBDC, el hermano feo de Bitcoin
Sé que grandes economistas, con quienes no tengo capacidad de medirme, defienden Bitcoin como la alternativa al sistema de moneda digital que quieren implantar, pero ¿para quienes hablan? Un “activo” que empezó con un precio de 10 dólares, llegó a los 60 mil y ahora está al borde de los 40 mil, ¿de verdad quieren que la gente corriente deposite su confianza en él?
La defensa que estos ilustres hacen de la criptomoneda reina es que el mercado está manipulado por los fondos, por los mismos fondos con intereses financieros en las compañías que están detrás de esta tecnología. Sí, esos fondos dirigidos por los que van a tomar café al Ritz antes de visitar la Bolsa.
Pero allá donde hay un problema, Papá Estado aparecer con su brillante solución, para que no tengas que pensar mucho.
La solución que nos ofrecen los gobiernos ante la inseguridad de las criptomonedas, son sus monedas digitales de banco central CBDC. Su implantación se justifica por diferentes motivos: pocos recursos naturales, evitar el blanqueo de capitales, que el dinero físico contagia el Covid, etc.
Estas CBDCs se quieren implantar a nivel global, aprovechando la tecnología de la cadena de bloques, pero sin la maldad inherente de una moneda cuyo valor se pueda manipular con un solo tuit[4].
El primero en probar su moneda fue China (la amiga de la libertad) con el yuan digital en el 2020, haciendo un lanzamiento más extenso en los Juegos Olímpicos de Invierno en 2022. En 2021, la UE dijo que se sumaba al carro, queriendo empezar las pruebas del euro digital en octubre de este año (2023). España también está experimentando su propio token[5] llamado EURM.
Dicho esto, la sustitución del dinero papel por el dinero digital tiene dos ventajas:
- No cogerás Covid.
- Ninguna otra.
La religión monoteísta del dinero
Llama la atención que nadie se aclare sobre cómo definir el dinero. El dinero fiduciario no tiene valor, es papel moneda en base a nada. Solo se sustenta en la creencia del pueblo en que vale algo y en el mandato del estado de que eso es dinero. Este timo ya aparece en Fausto[6], un invento que el propio Goethe atribuyó al diablo. Sin embargo, puedes pagar impuestos con él[7].
El dinero es un sistema de control, el dios único ante el que reverenciarse, el que decide cómo vas a vivir. Si se permite el dinero digital, podrán dejarte sin la gracia de ese dios, independientemente de lo que hayas trabajado para conseguirlo. Y al igual que en cualquier religión, es el sacerdote de turno quien dictamina qué es el bien y qué no.
El pasado 8 de noviembre, se aprobó en la UE la identidad digital[8], y el CBCD va ligado a esto. Es un control total de la persona y de sus comportamientos.
No, no es nuevo, es el uso de la tecnología para que los de siempre (Bolsa + Ritz), tengan más control sobre ti, mientras te hacen darles las gracias por convertir el mundo en un lugar donde nadie cometa el abominable crimen de comerse un trozo de ternera.
El dinero en la Revolución Integral
Esto importa porque urge reflexionar sobre qué es el dinero y cómo organizaremos la economía en nuestra RI. El ser humano ha sobrevivido sin dejarse intimidar por tiranos más fuertes y peores.
El dinero es solo la materialización de tu fuerza de trabajo, durante siglos usamos el trueque. Y si bien un sistema de intercambio universal puede ser una buena idea a priori, su diseño solo se concibió para hacer muy ricos a aquellos que tenían propiedad y control sobre el material al que se le daba la forma.
¿Por qué fue oro y no tomates?
Es vital comprender lo siguiente:
- La economía siempre debe tener una utilidad social.
- La economía es una ciencia social, una de las muchas maneras en las que las personas se relacionan entra ellas.
- La economía no es una ciencia exacta. No es predecible, pero si las crisis enriquecen siempre a los mismos a costa de empobrecer a los de abajo, es porque está siendo manipulada…, exacto, desde el Ritz. Pese a la manipulación, algo siempre les puede salir mal, porque depende del comportamiento humano no de los números.
- Las primeras relaciones comerciales se hicieron en base al trueque. ¡Funcionaron durante siglos!
- Establecer una sola forma de intercambio válido a la que se le atribuye un valor arbitrario es un ejercicio de poder que nada tiene que ver con las relaciones humanas naturales.
- Los impuestos, entre otros muchos males, son una manera de coaccionarte a aceptar esa forma.
- ¿Qué puedes hacer con un tomate? ¿Qué puedes hacer con el oro? Peor aún, ¿qué puedes hacer con un billete? Que el objeto de intercambio al que se le da valor no tenga utilidad en sí, provoca que la economía no esté al servicio de las personas.
- El dinero no es un fin en sí mismo, pero el poder sí lo es y con dinero se compra el poder. Por eso te exprimirán hasta la última gota de sangre. Y por eso, desde la RI, debemos rechazar cualquier tipo de intercambio que pueda ser emitido y manipulado por solo unos pocos.
Si de verdad lo entiendes, solo se trata de decidir entre nosotros cuál va a ser nuestro código de intercambio.
En mi humilde opinión…
Desde el truque hasta los “bancos de tiempo”, una economía sana y que cumpla su función real en la sociedad, debe ser construida entre todos. Las relaciones comerciales son una forma de pacificar y socializar entre diferentes pueblos y culturas. El trueque, que ya ha demostrado su utilidad durante siglos, es una forma ideal para poder intercambiar lo que tú tienes y produces, por lo que otro tiene y que tú necesitas, pero no produces. Es tan sencillo como eso.
Esto debe ser democráticamente elegido. Si bien, dentro de la misma comunidad se va tender a producir solo una serie de productos, y esto puede llegar a limitar el desarrollo, se podría estudiar la implantación de un banco de tiempo, y así dar también un lugar central a aquello que puede ser difícil de cuantificar y no siempre intercambiable, como pueden ser la educación o los cuidados.
Ahora es tu turno de hablar y de decir qué piensas sobre esto.
Las CBDCs llegarán y nos obligarán aceptarla, muy probablemente, cobrando los subsidios y pensiones a través de esta tecnología. Para esto, el empobrecimiento progresivo del pueblo viene muy bien.
Sin embargo, ¿qué motivo hay para desear que nuestro destino dependa de un sistema económico fraudulento?
Ahora es cuándo[9], es nuestro turno de hablar y de decidir, pero entre nosotros, sin importar lo que digan aquellos a los que nunca les hemos importado.
Celia Rodríguez
Por último y de mientras, te dejo enlace a mi pequeña guía de educación financiera. Puedes descargártela aquí.
[1] Si tienes menos de cuarenta, pregunta a tus padres.
[2] Blockstream es un buen ejemplo. Es una empresa de desarrollo de tecnología Bitcoin que opera desde el año 2014 gracias a la inversión de varias entidades, como AXA, cuyo actual presidente (y gerente desde 1998) es Henri de La Croix de Castries. Casualmente, también es presidente del club Bilderberg desde 2011.
[3] El petróleo se lleva acabando desde los 60 y el oro…, puede que desde que Nerón guardara sus lágrimas en un frasco.
[4] Elon Musk dispara un 20% la cripto dogecoin al aceptarla como medio de pago en Tesla (elconfidencial.com)
[5] Token o ficha: no es una moneda en sí, sino una unidad de valor representativo, como la ficha de un casino.
[6] Fausto, La Tragedia, acto primero, jardín de recreo: Mefistófeles convence al emperador de un reino en ruinas de que las fortunas que se enterraron antaño, ocultadas por miedo al robo, la guerra o sepultadas por las catástrofes naturales, aguardan bajo el suelo, en espera de ser descubiertas. Y mientras las desentierran y no, el emperador firma unos papeles en representación de ese valor que el pueblo acepta.
[7] Algunos economistas defienden que el dinero ha cambiado tantas veces en su respaldo y forma, que se puede simplificar su definición a algo tan simple como “aquello con lo que se pueden pagar impuestos”.
[8] https://www.lamoncloa.gob.es/serviciosdeprensa/notasprensa/asuntos-economicos/Paginas/2023/081123-reglamento-identidad-digital-europea.aspx
[9] Recomiendo el artículo de nuestro amigo Diego Martínez https://www.virtudyrevolucion.org/numeros-de-la-revista/numero-8-noviembre-2023/1531874_ahora-es-cuando
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Comentarios
esta tontera del bitcoin es un invento de los paises ricos para los tontos, aca en Chile esto no funciono y para que decir en el resto de los paises vecinos, con el bitcoin no se puede comprar ni un dulce de a peso en ningun negocio. esto se cae de maduro. pero es una perdida de tiempo hablar de esta lesera de las criptomonedas.
A los macucos lo que realmente le interesa es que todos usemos tarjetas , los bitcoins es para distraer a los tontos y que les regalen dinero a los que administran este enga;o.